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Cómo limpiar el lavavajillas: consejos prácticos
03 Enero 2024

Consejos prácticos para limpiar correctamente el lavavajillas

¿Te preguntas cómo mantener tu lavavajillas en condiciones óptimas para un rendimiento impecable? A continuación, te ofrecemos una guía detallada sobre cómo limpiar el lavavajillas a fondo, asegurando no solo platos brillantes sino también una higiene impecable.

Para comenzar, es crucial reconocer que un lavavajillas limpio no solo garantiza platos relucientes, sino que también contribuye a la durabilidad del electrodoméstico y a la salud de tu familia. Un lavavajillas que funciona eficientemente no solo ahorra tiempo y esfuerzo, sino que también asegura una limpieza más efectiva y una vajilla sin restos de alimentos.

Con el ritmo de vida actual, a menudo pasamos por alto la importancia de mantener nuestro lavavajillas en las mejores condiciones. No obstante, con estos consejos prácticos, podrás realizar una limpieza efectiva y sencilla que garantice un lavavajillas que funcione como nuevo durante más tiempo.

Importancia de la limpieza del lavavajillas

Antes de sumergirnos en los consejos prácticos que podemos poner a la prueba desde hoy mismo, es esencial comprender por qué la limpieza regular del lavavajillas es crucial. Un lavavajillas limpio no solo garantiza platos y utensilios sin residuos, sino que también previene olores desagradables y el crecimiento de bacterias

Realizar una limpieza regular también ayuda a prevenir problemas como obstrucciones en los brazos rociadores, desagües bloqueados y malos olores. Estos problemas no solo afectan el rendimiento del lavavajillas, sino que también pueden transferirse a tu vajilla, dejando residuos no deseados.

Invertir tiempo en el cuidado y mantenimiento adecuados del lavavajillas no solo mejora su durabilidad, sino que también asegura que cada ciclo de lavado sea eficiente y brinde resultados impecables. Es una práctica esencial para aquellos que buscan mantener su cocina en condiciones óptimas y garantizar la seguridad alimentaria en cada plato que sale del lavavajillas.

Paso 1: Limpieza exterior

Comencemos por el exterior. Aunque no lo parezca, un paño suave y húmedo con una solución de agua y vinagre es ideal para eliminar manchas y huellas dactilares. No olvides limpiar los controles y las esquinas, áreas propensas a acumulación de suciedad. Un exterior reluciente no sólo es estéticamente agradable, sino que también refleja el cuidado que brindas a tu electrodoméstico.

Paso 2: Limpiar los filtros

Los filtros pueden ser definidos como los guardianes esenciales que evitan que residuos no deseados entren a las tuberías. Si nunca has hecho este paso, de primeras te puede parecer complicado, pero, en realidad, es algo muy sencillo. Bastará con que retires los filtros según las instrucciones del fabricante y los laves con agua tibia y jabón suave. Después de esto, inspecciónalos en busca de restos de alimentos y límpialos completamente. Un filtro obstruido reduce la eficiencia del lavado y puede generar olores desagradables.

Paso 3: Limpiar los brazos rociadores

Los brazos rociadores son responsables de distribuir el agua durante el ciclo de lavado. Usa un cepillo de dientes viejo o una aguja para desatascar los orificios. Asegúrate de que no haya obstrucciones que limiten el flujo de agua. Unos brazos rociadores limpios garantizan una distribución uniforme del agua, lo que se traduce en platos más limpios.

Paso 4: Limpieza del interior

Para una limpieza profunda, utiliza vinagre blanco. Coloca una taza en la rejilla superior y realiza un ciclo de lavado en vacío. El vinagre descompone los depósitos minerales y elimina los residuos acumulados. Si persisten manchas, especialmente de agua dura, considera el uso de un limpiador específico para lavavajillas.

Paso 5: Desodorización con bicarbonato de sodio

¿Tu lavavajillas tiene un olor desagradable? El bicarbonato de sodio es tu aliado. Coloca una taza en la rejilla inferior y realiza un ciclo corto con agua caliente. El bicarbonato de sodio absorberá los olores persistentes, dejando tu lavavajillas fresco.

Paso 6: Enfrentar los desagües obstruidos

Si notas que el agua no se está drenando correctamente, es posible que tengas un desagüe obstruido. Retira los restos de comida visibles, luego vierte una mezcla de bicarbonato de sodio y vinagre por el desagüe. Después, enjuaga con agua caliente para eliminar los residuos.

Paso 7: Mantén las juntas limpias y secas

Las juntas de la puerta son puntos propensos a la acumulación de humedad y suciedad. Límpialas con un paño seco regularmente y asegúrate de que estén completamente secas después de cada ciclo para evitar la formación de moho.

Paso 8: Programa de autolimpieza

Muchos lavavajillas modernos tienen una función de autolimpieza. Consulta el manual del usuario para activar este programa, que utiliza altas temperaturas para eliminar residuos y bacterias. Realizar este proceso regularmente es clave para mantener la higiene interna.

Siguiendo estos consejos prácticos, tu lavavajillas estará en condiciones óptimas. No sólo garantizarás platos y utensilios relucientes, sino que también contribuirás a la eficiencia a largo plazo de tu electrodoméstico. Incorpora estos hábitos de limpieza en tu rutina y disfruta de la comodidad y limpieza que un lavavajillas bien mantenido puede ofrecer. ¡Invierte en el cuidado de tu lavavajillas hoy para una cocina más limpia mañana!